5/02/2009

Pobre por vocación, artículo de El Contenedor de Los Ulen

No me avergüenza contarlo. Al contrario. Me siento muy orgulloso de mi estado paupérrimo, porque yo soy pobre por vocación. Soy un hombre de escaso valor, y a mucha honra.

Decidí ser pobre a la temprana edad de los 14, cuando tuve que elegir la carrera que tenía que definir mi personalidad. Entendí que tenía que optar por un camino que me llevase a perderlo todo, así que estuve dudando entre ser actor, músico o artista plástico. Me decidí por lo último, ya que me arruinaría de inmediato gracias al elevado coste de los materiales para hacer arte y a la escasez de compradores de mis obras. Hice de todo para conseguir no tener nada, y casi lo logro. Con el dinero que me daban de la beca compraba los materiales más caros para pintar, y hacía cuadros horribles para que nadie los adquiriera. Pero me di cuenta que la pobreza no sólo estaba en lo material. También existía la pobreza espiritual. Entonces descubrí que poseía conocimientos. Y yo, que no quería tener nada de nada, fui atesorando datos en mi cabeza hasta hacerme minimamente inteligente…

Como iba diciendo, es muy difícil des-prenderse de las cosas. Se requiere de mucho tiempo y mucha apatía. Incluso pienso que la sociedad no quiere que nadie sea pobre. Continuamente están dándome cosas. Si me siento en una esquina a perder el tiempo, me tiran monedas cerca de mis pies. Si me ven sin ropa, siempre hay una señora mayor con los labios pintados por fuera que me da una bolsa con rebecas, pantalones y zapatos de viudo. Si no quiero tener nada en el estómago, se empeñan en ofrecerme bocadillos y tetabriks de leche. Y se trata de gente que no conozco de nada, ¡gente a las que no les pido nada!. Ya está bien, ¿no?.

Pero lo material no es lo que me preocupa. Lo peor es tener cosas en la cabeza. Tener pensamientos. Ideas. Proyectos. Yo quiero ser pobre, pobre. Y me resulta muy complicado deshacerme de mi propio léxico, de lecciones que aprendí en el colegio que creí olvidadas, pero que vuelven cuando menos me lo espero. Sólo el tiempo puede quitarme esto. Sólo el tiempo.

La gente me dice que si no quiero tener nada debería morirme. Pero lo que no entienden es que yo, lo que quiero es no tener, pero si quiero ser.

Quiero vivir sin nada que me ate a nada. Quiero no tener sentimientos, no tener recuerdos, no tener calcio en los huesos ni dioptrías de más. Quiero ser pobre, por favor, quiero tener cero cosas y sentirme libre por fin.

¿Me dejarán cumplir ustedes mi vocación
Este artículo está editado en el original periódico llamado El Contenedor, publicado por Los Ulen para su espectáculo Maná Maná. En la publicación encontraréis textos de Kiko Veneno, Pepe Quero, Jesús Vigorra, Juan José Téllez y Alejandro García. Sólo puede conseguirse en los teatros donde actúan. Por cierto, aprovecho para recomendar la obra Maná Maná, que está del 15 al 30 de mayo en el Teatro Lara de Madrid. Os vais a reir hasta reventar.

8 comentarios:

Bramida dijo...

muy buenos los ulen :)
tuve ocasión de conocerlos cuando trabajaban con friedhelm -le llamábamos flite o fli- :)
...
qué buenos ratitos me han hecho pasar!

P.D.: el artículo es absolutamente clown ;)

Antonio García Villarán dijo...

Sabes que van a inaugurar dentro de poco la sala FLI en honor a él? Será en el Pol. Industrial Store, en la nave de Los Ulen.
Conoces su Blog?
Un saludo

Esther dijo...

Querido Antonio,
La pobreza es un sentimiento y un estado del ánimo, no una situación objetiva. Algunos con muy poco se sienten ricos y a otros con mucho, siempre les falta algo. Por no hablar de la pobreza intelectual, cuántos conocemos que presumen de títulos, cargos y premios, y todos sabemos que no saben nada...!

Esther dijo...

Querido Antonio,
La pobreza es un sentimiento y un estado del ánimo, no una situación objetiva. Algunos con muy poco se sienten ricos y a otros con mucho, siempre les falta algo. Por no hablar de la pobreza intelectual, cuántos conocemos que presumen de títulos, cargos y premios, y todos sabemos que no saben nada...!

Antonio García Villarán dijo...

Esther, estoy completamente de acuerdo contigo. Hay mucha gente que se agobia demasiado por que cree ser pobre, teniendo un mundo interior muy rico. A veces la pobreza no tiene nada que ver con el dinero.
Un saludo.

Miguel Gómez Losada dijo...

Buenos días desde la ciudadela (9:58h) Feliz mañana de reposo Antonio

E.Monje dijo...

querer ser te hace un pelín más rico de espíritu (que está lleno de intenciones)

besos

Bramida dijo...

pues no sabía que fueran a inaugurar la sala Fli :)
(he llegado al blog de los ulen a través de cangrejo pistolero ediciones blog :D)
...

saludos
y gracias por toda la información que facilitas

Translate